¿Quieres saber cómo tener días más productivos?

¿Qué hice hoy? ¿cuántas cosas pendientes terminé? ¿avancé en mis proyectos? ¿hice cosas importantes? Si no tienes claras las respuestas a las preguntas anteriores, es probable que tus días no estén siendo productivos.

Cuando empezamos el día, nos levantamos y por lo general vamos de una actividad a otra en automático. Vamos haciendo lo que se nos atraviesa, lo que sentimos que es urgente o parte de una rutina, nos distraemos con llamadas, redes sociales o cosas que no son realmente sustantivas y terminamos el día agotadas, pero sobre todo, sintiendo que a pesar de no haber parado, no hicimos nada.

¿Y a qué nos referimos con esta sensación de no haber hecho nada? ¿Entonces, por qué estamos tan cansadas? Pues porque tendemos a ocuparnos en cosas que no son realmente importantes, que no están relacionadas con nuestros propósitos o proyectos, cosas que nos hacen sentir que avanzamos hacia lo que queremos, que nos dan satisfacción porque estamos generando cambios, bienestar, crecimiento.

¿Y qué podemos hacer para sentir y tener realmente días productivos?

Sólo tienes que hacer una cosa.

Antes de irte a dormir, dedica entre 5 y 15 minutos a planear el día siguiente.

Esto a veces nos da flojera o nos abruma porque sentimos que tenemos que tener todo resuelto, o que nos tenemos que apegar a horarios muy específicos o rígidos, o que tenemos que pensar en absolutamente todo lo que tenemos que hacer desde levantarnos, ponernos los tenis, hacer el desayuno, hasta el momento de mandar a dormir a los niños, recoger la cocina, etc. y solo de apuntar todo, ya nos cansamos, lo cual no nos motiva, no le vemos sentido y más que ayudarnos, nos hace irnos a la cama con la pesadez de lo que nos espera el día siguiente.

Para planear tu día, solo vas a pensar en tres temas:

1. Compromisos. Cosas que tienen un horario específico y que tienen que ser acordadas con otra persona o personas, por ejemplo, la junta en el trabajo con tu equipo, el desayuno de la sociedad de padres. Cosas que no son del día a día. Apúntalas.

2. Proyectos o tareas relacionadas con tus metas. Las cosas que necesitas hacer para trabajar en tus proyectos, propósitos o metas. No apuntes más de tres.

3. Temas personales. Tu cita con el dentista, comprar un regalo para una amiga, irte a cortar el pelo.

Definir y apuntar estas cosas en tu agenda, te permitirá distribuir tu tiempo en el día, priorizar las cosas que son importantes, te va ayudar a enfocarte más en lo que tienes que hacer lo que va a disminuir las distracciones y el desperdicio de tiempo.

Cuando te vayas a dormir, vas a tener cosas que palomear que están relacionadas con temas que te hacen sentir más satisfacción y cosas que te están manteniendo en el camino para alcanzar tus objetivos.

Así que saca tu agenda, define tus prioridades y planea tu día.

Cuéntame cómo te va!