¿Las metas te dan flojera? Descubre por qué
Esto de establecer metas se escucha por muchos lados. Lo escuchas en la escuela, en la oficina, en el gimnasio y muchas veces ya hasta nos genera rechazo, flojera. Sientes que ahí viene otra vez el choro mareador de “tips para establecer metas”, “características de las metas exitosas”, “cómo establecer metas”.
Lo primero que tenemos que entender, es que a muchos de nosotros nadie nunca se sentó a enseñarnos de forma clara y específica, la importancia de las metas y cómo establecerlas.
Vamos, no tuvimos por ejemplo en la escuela una materia que se llamara, la importancia de las metas y cómo definirlas. No tenemos claro el beneficio de hacer esto y nos genera estrés, conflicto, rechazo y por supuesto mucha flojera.
Y de esto precisamente vamos a hablar hoy.
Cuando algo nos genera conflicto, tendemos a rechazarlo. Y cómo no nos va a generar conflicto el tema de las metas si de entrada no comprendemos la importancia de fijarnos metas. Pero como decía al inicio, tenemos que empezar por hacernos conscientes de nuestro conocimiento acerca del tema.
Es uno de esos temas que asumimos que dominamos porque lo escuchamos por todos lados, pero no nos damos cuenta de lo poco que sabemos de el y lo poco que lo ponemos en práctica. Acabamos poniendo metas como cuando recurrimos a los propósitos de año nuevo solo para cumplir con la tradición del brindis y nos quedamos con la idea de que ya cumplimos. Esto hace que no seamos serios al momento de establecer metas.
Otras razones por las que no ponemos metas es porque nos da miedo ser criticados por otros, cuando opinan que nuestras metas son muy ambiciosas o ridículas para ellos, o por el temor a comenzar y fracasar.
Otro muchos no establecen metas porque desconocen que hay procesos para hacerlo que nos llevan a alcanzarlas más fácilmente. Es como querer jugar un juego sin tener las reglas, sin saber cómo jugar. ¿Qué pasa? Pues que mejor no juego o que al no entender de que va, me da flojera meterme a averiguar.
Entonces ¿qué es lo primero que tenemos que hacer para que se nos quite la flojera de poner metas?
Primero hay que tener claro que las metas no son solo para temas laborales, o financieros, este es uno de las principales creencias que nos llevan a no pensar en lo que nos gustaría lograr.
Una vida balanceada requiere que tengamos objetivos para las distintas áreas de nuestra vida. De qué nos serviría tener mucho dinero, si estamos agotados y estresados porque no definimos lo que queremos lograr en las áreas de esparcimiento y salud por ejemplo.
Otra cosa que tenemos que entender antes de plantear metas, es la importancia de las mismas, los beneficios que nos puede aportar tenerlas.
Las metas nos permiten enfocar nuestra energía para lograr lo que queremos y nos ayudan a deshacernos de las cosas que nos distraen, que nos quitan el tiempo, que no valen la pena.
Una meta bien definida, va a ser medible, nos va permitir medir el progreso que vayamos teniendo, lo que aumenta nuestra motivación para seguir trabajando en ella.
Cuando tenemos metas, la toma de decisiones se facilita, pues estas deberán ser congruentes con lo que queremos lograr. Nos es más fácil tomar decisiones, pues tenemos claro hacia dónde queremos ir y las decisiones que tomemos idealmente nos acercaran a nuestros objetivos.
Las metas son la manifestación de nuestros sueños, son cosas que deseamos hacer, ser o tener y una meta es la forma de aterrizarlo para poder hacerlo real.
Las metas pueden cambiar y mejorar nuestra vida pues promueven los cambios, nos llevan a movernos y a accionar para alcanzarlas, nos sacan de nuestra zona de confort, nos llevan a seguir aprendiendo, desarrollándonos, creciendo para superar nuestros límites y ser cada día mejores.
Pero sobre todo, una meta da sentido a nuestras vidas, nos hace pararnos de la cama con algo en lo que trabajar, nos ayuda a dejar de poner nuestra atención en todo lo que no nos gusta, lo que esta mal, nos da un propósito, nos hace sentir productivos, nos mantiene activos y genera mayor bienestar en nuestras vidas.
Espero que el conocer más del tema, ayude a que se te quite la flojera y te lleve a empezar a ponerte metas.
Recuerda que vamos con pasos pequeños. Empieza con una cosa sencilla a la vez, que te rete pero que no te abrume.
¿Qué crees que pase si consigues lo que te propongas? ¿Estás dispuesta a darte la oportunidad y superar el miedo al fracaso?
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