La clave para el éxito que nadie te ha dado

Cuando trabajo con mis clientes, lo primero que les pregunto es como están a nivel personal.

No cómo van en el negocio, ni qué retos tienen, o cómo creen poder aumentar sus ingresos.

¿Por qué hago primero esta pregunta? Porque cuando no estamos bien, cuando nuestra vida no esta en equilibrio, nos es muy difícil enfocar nuestra atención y energía en algo fuera de nosotros.

Nos sentimos desmotivadas, cansadas, desgastadas y el esfuerzo de emprender algo en un trabajo o negocio nos requiere de más energía. Al no tener la energía suficiente, no vemos avances, nos atoramos, no tenemos claridad, lo que hacemos no rinde frutos y eso genera más frustración y cansancio.

Así que vamos a empezar por hacer una lista en orden de importancia de las cosas que más te afectan. Las cosas que más te preocupan, te generan estrés, te roban energía, demandan el mayor porcentaje de tu atención y tu tiempo.

Ya que tengas la lista, analiza lo que pusiste en el número uno.

Este tema está en tu control. ¿Es algo sobre lo que puedes ejercer alguna influencia, que tu puedes cambiar o mejorar, depende solo de ti que mejore? Si tu respuesta es si. Piensa en tres formas en las que lo puedes mejorar o solucionar. Ponle fecha a cada acción y comprométete a hacerlo. A este paso le llamo cambia la preocupación por ocupación.

Si tu respuesta fue no. ¿Qué necesitas hacer para dejar de prestarle atención? ¿A quién le corresponde hacerse responsable de hacer el cambio? Puede que sea una responsabilidad compartida contigo, de ser este el caso, piensa que necesitas hacer tu para que las cosas mejoren o cambien por tu parte y hazlo lo más pronto posible.

Para poder hacer todo lo anterior, lo más importante es que trabajes con lo que es, con la realidad. Empieza a diferenciar lo que son expectativas, situaciones ideales, de lo que es realmente. Cuando ves las cosas por lo que son, todo se vuelve más claro. ¿Por qué no nos gusta ver la realidad? Probablemente porque no va con la imagen de lo que creías que ibas a tener en tu vida y nos aferramos a querer ver otra cosa para justificar nuestras decisiones, para decirnos que todo va bien, para tener una sensación de satisfacción aun cuando sea falso.

El problema con esto, es que se va haciendo como una bola de nieve, las expectativas generan ilusiones, mentiras, que necesitamos cubrir con otras expectativas o ilusiones y acabamos no teniendo nada en concreto. Nos desgastamos ocupando nuestra energía, atención y tiempo en querer mantener una ilusión, peleándonos con algo irreal, queriendo controlar la fantasía, en vez de trabajar con cosas concretas, tangibles, reales. Y es por esto que no vemos resultados, que la vida nos sigue decepcionando, que no avanzamos, porque todo lo que hacemos lo hacemos sobre la irrealidad y lo irreal, no es tangible, no es manejable, solo se hace más complejo, más grande y vive solo en nuestra mente.

Asi que comienza por aceptar lo que es, tal cual es y entonces si, dedícate a encontrar soluciones que te permitan cambiar o mejorar las cosas.