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¿Cómo se cuando terminar con una relación?

Este es un tema por el que muchos hemos pasado. Conoces a alguien, formalizas la relación, son novios o como quieras llamarlo, las cosas se empiezan a poner serias, pero te das cuenta que no todo es color de rosa, que no todo esta bien o que no te sientes como al principio, pero no estás segura si es por ti, por el, porque hay situaciones del día a día que han hecho que las cosas cambien.


Piensas que es mejor malo por conocido que bueno por conocer, piensas que quizás no es tan malo lo que pasa, que no quieres quedarte sola, en fin, no tienes claro si es momento de terminar con la relación o si te quedas un poco más a ver que pasa.



¿Qué puedes hacer para tomar la mejor decisión? Hay que hacerse algunas preguntas y hacernos conscientes de lo que queremos, las cosas con las que estamos dispuestas a vivir porque podemos manejarlas, aprender de ellas y crecer y cuáles son nuestros límites.


Lo más importante de todo, es poder ver las cosas por lo que son, no por lo que quisiéramos que fueran, ver al otro y conocernos lo suficiente para ver la realidad en la que estamos quitándole los moños que le ponemos cuando estamos en el periodo de enamoramiento. Este periodo en el que todo es lindo, él es lindo, todo nos gusta, todo lo justificamos, todo esta bien y no hay límites respecto a las cosas que en otras condiciones no aceptaríamos, no nos gustan o con las que no podríamos vivir en el día a día una vez que este periodo pase.


¿Qué preguntas te puedes hacer?


-¿Son más las cosas positivas que las negativas en la relación?

No todo es color de rosa, ni somos perfectos. Todos tenemos defectos, cometemos errores, somos humanos, pero como yo digo, mientras haya tela de donde cortar, es decir, cosas positivas con las que puedas trabajar con el otro, podemos encontrar soluciones y negociar.


Si las cosas que consideras importantes como puede ser: una buena disposición, una comunicación sana, las ganas de escuchar al otro para comprenderlo, la capacidad de ambos de poder ceder y negociar de forma asertiva, están ahí, siempre habrá la posibilidad de superar los conflictos normales de las relaciones y mejorarla para seguir adelante.


Si son más las cosas negativas, tendrás que considerar si quieres remar contracorriente, pues habrás más problemas que momentos satisfactorios. Son sencillamente matemáticas.


-¿Dónde pongo el limite? ¿Sabes cuáles son tus límites?

Hay que tener claro hasta donde estamos dispuestas a tolerar. La tolerancia y / o empatía son fundamentales en cualquier relación, deben existir para poder convivir con los demás. Alguien va a cometer un error, a pasarse de la raya por estrés, carácter, o por temas personales y tenemos que saber cuál es nuestro limite.


También puede ser que pongamos nuestro límite en otro tipo de temas como el no estar dispuestas a pasar tiempo solas. Esto aplicaría por ejemplo en el caso de que nuestra pareja tuviera que pasar mucho tiempo fuera por cuestiones laborales.


Así que siéntate un día a considerar qué es lo que esperas de tu pareja y qué cosas definitivamente no puedes tolerar.


-¿Aceptas a la persona con todos sus defectos?

Desde que hable con la boca llena, hasta que no le guste ir de viaje, que no quiera interactuar con tu familia, desde los más sencillos hasta los más complejos. Los “defectos” que finalmente son subjetivos porque dependen justo de las cosas que nos gusta y las que no nos gustan, van a seguir ahí toda la vida, y cuando estamos en el periodo de enamoramiento, tendemos a minimizarlos o ni siquiera los vemos. Has una lista de las cosas que te molestan, aun cuando sean muy pequeñas y después imagínate viviendo con esto por toda una vida, con dificultades económicas, problemas de salud, en situaciones donde haya retos fuertes como pareja, familia o laborales. ¿Qué tanto te van a pesar? ¿Qué tanto van a evitar que puedas estar presente para el otro en una situación donde necesita de tu apoyo?


-¿Estoy en una relación esperando que el otro cambie por amor a mi?

Si estas en una relación pensando que porque el otro te quiere va a cambiar para ajustarse a tus expectativas, te tengo una mala noticia. Las personas difícilmente cambian por alguien más, pueden modificar algunas conductas, hacer cosas provisionalmente porque les interesa tu aprobación o reconocimiento, pero en cuanto dejan de necesitar esto y llega la costumbre del día a día, tienden a regresar a sus viejos hábitos. Las personas cambiamos cuando el cambio coincide con lo que queremos o necesitamos, no porque alguien más nos lo pida.


Te invito a que te hagas estas preguntas, que las analices para entonces tomar la decisión de quedarte o salirte de una relación. Muchas veces estamos muy apegados a la pareja porque se genera una zona de confort en donde obtenemos cosas que nos facilitan la vida, que nos dan cierta tranquilidad, pero siempre hay un costo. Cuando le decimos que si a algo, le decimos que no a otra cosa. ¿A qué cosas le estás diciendo no, por quedarte en una relación? ¿Cuáles son más importantes?


No importa lo que decidas, no importa lo que opinen los demás, lo importante es que tomes la decisión en consciencia y que te hagas responsable de ellas y de las consecuencias de la misma, finalmente, es tu vida y la que va al volante y decide a dónde quiere ir, eres tu.


¿Qué tipo de relación quieres? ¿Tu relación te lo está dando?

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