¿Cuándo es el mejor momento para rediseñar?

Cuando piensas en remodelar algo, cambiar tus muebles, hacerte un cambio de look, ¿cuál es el objetivo del cambio? ¿Qué te lleva a considerar hacer un cambio?, ¿que te lleva a pensar que tienes que cambiar algo?

Si piensas en tu casa, uno de los ejemplos que me vienen a la cabeza es cuando tienes un bebé. Arreglas su cuarto para que funcione para las necesidades de un bebé, para que esté cómodo, seguro, para que te sea fácil cuidar de el, tener sus cosas a la mano.

Cuando el bebé crece, empieza a moverse por si solo, a jugar, a alcanzar cosas, el diseño de su habitación muchas veces ya no funciona para las necesidades que tienen tanto tu hijo como tu.

Ahora necesitas que esté en un espacio seguro, donde pueda jugar, tener sus cosas a la mano, sin ponerse en riesgo.

Entonces el nuevo diseño de este espacio tiene que ser en función de que se satisfagan las nuevas necesidades tanto de tu hijo como tuyas.

Cuando pensamos en cambiar cosas en nuestras vidas, podríamos tener en mente este ejemplo para decidir qué queremos hacer.

Podemos identificar cuáles de nuestras necesidades no están siendo atendidas con nuestro estilo de vida, con el tipo de perspectivas que estamos eligiendo tener, con las creencias que estamos decidiendo mantener.

Así como con el cuarto del bebé, nos podemos dar cuenta de que esos “muebles”, esa distribución, ya no nos sirve, ya no es práctica, ya no funciona para lo que queremos hacer, para sentirnos como queremos, para alcanzar nuestros objetivos, para vivir nuestros valores. Entonces nos va a ser más fácil darnos cuenta de que es momento para un rediseño.

Y para definir qué tipo de diseño necesitamos ahora, hay que tener en mente que:

La función del diseño, es dejar que el diseño funcione. -Micha Commeren

Un buen diseño, no se pone el pie solo, permite que disfrutemos de él, un buen diseño nos ayude a lograr lo que queremos.

La función de los cambios en nuestra vida, son para tener una vida más satisfactoria, para gozar más de lo que hacemos, para ayudarnos a alcanzar nuestras metas, nuestros objetivos, para seguir desarrollándonos, actualizándonos, mejorando cada día.

Revisa cómo está tu diseño, cómo están tus creencias, cómo estas viviendo tus valores.

Pregúntate si tus perspectivas te permiten ver soluciones, opciones que te sumen a tu proyecto de vida.

Observa si tus áreas de vida están atendidas.

Si te das cuenta de que algo no te gusta, no te funciona, no te hace feliz, es momento de una actualización, de un rediseño.